Un lujo separado, no una amenidad incluida
En las ciudades densas y poco amigables para los coches de los Países Bajos, un espacio de aparcamiento privado (parkeerplaats) es un lujo significativo. Es crucial que los inquilinos comprendan que un espacio de estacionamiento es casi nunca está incluido en el alquiler básico de un apartamento. Se considera una amenidad separada que debe ser arrendada bajo un contrato separado con una cuota mensual adicional. Esto se aplica tanto a espacios exteriores individuales como a plazas en un garaje de estacionamiento compartido bajo el edificio. El alquiler anunciado para el apartamento es solo para el espacio habitable. El costo del parking (parkeerkosten) es un gasto mensual separado y, a menudo, sustancial, que debe ser tenido en cuenta en su presupuesto.
El contrato de alquiler de aparcamiento
A menudo, un inquilino firma dos contratos separados: uno para el apartamento y otro para el espacio de aparcamiento. La cuota mensual por un espacio de aparcamiento puede variar drásticamente según la ubicación, desde alrededor de €50-€75 en una ciudad más pequeña hasta mucho más de €300-€500 al mes en el centro de la ciudad de Ámsterdam o La Haya. Este contrato separado también significa que puede tener términos diferentes respecto a la terminación o los aumentos de alquiler. El arrendador es responsable de asegurar que el espacio sea accesible y esté mantenido (p. ej., la puerta del garaje funciona, la iluminación está funcional), pero el inquilino es responsable de pagar la cuota mensual y de cumplir las reglas de la instalación de estacionamiento.
La alternativa: el permiso de estacionamiento municipal (Parkeervergunning)
Para los inquilinos sin un espacio de estacionamiento privado, la alternativa es el estacionamiento en la vía pública. En casi todos los barrios urbanos, el estacionamiento en la vía pública es de pago, y los residentes pueden solicitar al municipio (gemeente) un permiso de estacionamiento (parkeervergunning). Este permiso permite a un residente de una área específica estacionar en la calle sin tener que pagar en el parquímetro cada vez. Sin embargo, este sistema tiene dos grandes inconvenientes. Primero, el costo de un permiso aún puede ser alto (cientos de euros por año). Segundo, y lo que es más importante, en las zonas más populares, a menudo existen listas de espera extremadamente largas (wachtlijsten) para estos permisos, que a veces pueden extenderse durante varios años. La escasez y los largos tiempos de espera para los permisos son precisamente la razón por la que un espacio de estacionamiento privado y dedicado es una mercancía tan valiosa y costosa en el mercado de alquiler.