Solicitando como un único hogar
Una solicitud conjunta (solicitud conjunta) es el procedimiento estándar cuando dos o más personas que forman un solo hogar solicitan alquilar una propiedad juntos. Este es el tipo de solicitud típico para parejas casadas, parejas registradas, convivientes (parejas que conviven) y familias. Se diferencia de una 'solicitud de grupo' para compartidores de vivienda no relacionados (compartidores de vivienda), ya que los solicitantes son considerados una única unidad económica y social por el arrendador. La solicitud se evalúa en función de la fortaleza colectiva del hogar, pero también impone responsabilidad legal colectiva a todas las partes.
Cómo se evalúan las solicitudes conjuntas
Al evaluar una solicitud conjunta, los propietarios y agentes suelen mirar el ingreso bruto combinado de los solicitantes. El requisito de ingresos, por ejemplo, que el ingreso bruto mensual debe ser 3,5 veces la renta, suele aplicarse al ingreso total del hogar. Esto permite a las parejas reunir sus recursos para calificar para una propiedad que podrían no ser capaces de pagar individualmente. Ambos solicitantes estarán sujetos al proceso completo de revisión, que puede incluir verificaciones de crédito y solicitudes de referencias de arrendadores para cada persona.
La consecuencia legal crítica: 'responsabilidad solidaria'
Es fundamental que los solicitantes conjuntos entiendan que si su solicitud tiene éxito, casi con toda seguridad ambos estarán nombrados en el contrato de alquiler y serán considerados solidariamente responsables ('responsabilidad solidaria'). Este es un término legal crítico. Significa que cada inquilino es responsable de forma individual de las obligaciones completas del contrato de alquiler, no solo de su 'mitad'. Si uno de los inquilinos abandona la propiedad o no puede pagar su parte del alquiler, el arrendador tiene el derecho legal de exigir el alquiler mensual completo al inquilino restante. Esto también se aplica a cualquier daño a la propiedad; el arrendador puede responsabilizar a cualquiera de los inquilinos por el costo total de las reparaciones. Esta responsabilidad compartida es un aspecto fundamental de firmar un contrato de arrendamiento como pareja o como hogar.


















