La Fase de Evaluación
La revisión de la solicitud es la etapa que sigue a la criba y verificación inicial de sus documentos. En este punto, es probable que el agente inmobiliario haya elaborado una lista corta de las tres a cinco candidaturas más calificadas. El proceso de revisión implica al agente y, a menudo, al propio arrendador, comparar estos expedientes seleccionados entre sí para tomar una decisión final. Ya no se trata simplemente de cumplir con los requisitos mínimos de ingresos; es una evaluación competitiva. Los tomadores de decisión volverán a leer las cartas de motivación, compararán los tipos de contratos de trabajo (un contrato permanente en una gran empresa multinacional casi siempre superará a un contrato a término fijo en una startup), y formarán una opinión subjetiva sobre quién sería el inquilino 'mejor' o más 'seguro' para la propiedad.
Un Enfrentamiento Subjetivo y Opaco
Para el inquilino, la revisión de la solicitud es la parte más opaca y frustrante de todo el proceso. Es una deliberación a puerta cerrada sin criterios publicados y sin transparencia. La decisión final puede depender de una multitud de factores subjetivos y sesgos inconscientes. ¿El arrendador prefiere a una persona soltera tranquila o a una pareja estable? ¿Tienen sesgo contra los inquilinos con mascotas, incluso si el edificio las permite? ¿La carta de motivación de un candidato simplemente resuena más personalmente con ellos? Como a los arrendadores y agentes no se les exige proporcionar ninguna razón de su elección, son libres de tomar decisiones basadas en estas intuiciones intangibles. Esta falta de responsabilidad crea un entorno perfecto para que ocurra discriminación bajo la apariencia de una 'elección personal'. Su solicitud meticulosamente preparada, que demuestra que es un candidato financieramente perfecto, puede descartarse fácilmente porque el arrendador simplemente 'tenía un mejor presentimiento' de alguien más.