El concepto más amplio de la deuda
Mientras huurachterstand (morosidad por alquiler) se refiere específicamente a estar atrasado en la kalehuur (alquiler base), betalingsachterstand es un término más amplio que abarca cualquier incumplimiento de cumplir una obligación de pago al arrendador. Esto puede incluir el alquiler base, pero también se aplica a otros pagos contractualmente acordados. El ejemplo más común es caer en morosidad con la liquidación anual eindafrekening (liquidación final) de los costos de servicio. Si los costos de servicio reales del año fueron mayores que los anticipos mensuales pagados por el inquilino, el inquilino está legalmente obligado a pagar la diferencia. No pagar esta cantidad constituye una betalingsachterstand, incluso si el alquiler base siempre se ha pagado a tiempo.
Esta distinción es importante. Aunque una huurachterstand de dos a tres meses es una ruta muy clara y directa a un desalojo ordenado por un tribunal, una betalingsachterstand relacionada con una liquidación de costos de servicio disputada es un asunto más complejo. Un inquilino podría negarse a pagar la cantidad extra porque cree que los cálculos del arrendador son incorrectos o no están respaldados. Esto puede generar un conflicto legal que la Huurcommissie o un juez tendría que resolver. Sin embargo, si se determina que la reclamación del arrendador es válida y el inquilino aún se niega a pagar, esta betalingsachterstand también puede considerarse un incumplimiento del contrato y podría, en última instancia, contribuir a una acción legal contra el inquilino.
Un historial de falta de fiabilidad
Un historial de betalingsachterstand, incluso si las deudas se liquidan eventualmente, puede usarse en contra de un inquilino. Los arrendadores buscan inquilinos fiables y sin complicaciones. Alguien que continuamente paga su alquiler con una semana de retraso, o que frecuentemente disputa y retrasa el pago de la liquidación de costos de servicio, puede ser etiquetado como un inquilino "difícil". Esto puede tener consecuencias graves cuando llega el momento de mudarse. Un arrendador podría proporcionar una huurdersverklaring (referencia del arrendador) negativa que mencione un 'historial de impagos', incluso si la cuenta está actualmente en claro. Esto puede hacer que sea extremadamente difícil encontrar una nueva propiedad, ya que los posibles arrendadores lo verán como una gran señal de alerta.
Por lo tanto, mantener un historial de pagos limpio es más que evitar problemas legales inmediatos. Se trata de construir un historial de alquiler positivo que preserve su movilidad habitacional futura. Cualquier inquilino que prevea dificultades para realizar un pago, ya sea la renta o una liquidación anual, siempre estará mejor atendido al comunicarse proactivamente con el arrendador. Ignorar el problema y permitir que ocurra una betalingsachterstand crea una mancha negra en su historial y le da al arrendador una pieza poderosa de evidencia que puede usarse en su contra, tanto durante la tenencia de la vivienda como mucho después de que haya terminado.