Una referencia de carácter para inquilinos
Una declaración-del-arrendador, o declaración del arrendador, es una forma estandarizada de referencia de alquiler utilizada en el mercado de vivienda holandés. Es un documento formal, proporcionado por su arrendador actual o anterior, que sirve como un 'certificado de buen comportamiento como inquilino.' El objetivo principal de esta declaración es tranquilizar a un posible nuevo arrendador de que tiene un historial probado como inquilino fiable y responsable. En un mercado competitivo donde los arrendadores a menudo deben elegir entre varios solicitantes calificados, una declaración-del-arrendador positiva puede ser un factor decisivo que distinga su solicitud.
La declaración normalmente confirma varios puntos clave: la dirección y la duración de su arrendamiento, una confirmación de que pagó su alquiler de forma constante y a tiempo, una declaración de si causó alguna molestia (molestias), y una declaración sobre si hubo algún problema al mudarse. El documento suele ser un formulario estandarizado proporcionado por el nuevo agente o la corporación de vivienda, que luego se le solicita a su arrendador anterior que complete y firme. Es una forma de referencia más estructurada y verificable que una carta simple en formato libre.
Un requisito común, especialmente en el sector regulado
La solicitud de declaración-del-arrendador es particularmente común cuando se solicita vivienda social o alquileres de rango medio a través de las corporaciones de vivienda. Para estas organizaciones, es una parte estándar de su evaluación de riesgos y del proceso de diligencia debida. También se está solicitando cada vez más por parte de arrendadores privados y agentes inmobiliarios en el sector libre como una capa adicional de verificación. Para un inquilino, esto significa que es importante mantener una buena relación con su arrendador y asegurarse de dejar su arrendamiento en buenos términos. Un arrendador generalmente no está legalmente obligado a proporcionarle esta declaración, por lo que su obtención depende de su buena voluntad. Una negativa de un arrendador para proporcionarla, o la entrega de una negativa, puede ser un obstáculo importante para asegurar una nueva vivienda.
Para expatriados o inquilinos primerizos que no pueden proporcionar una declaración-del-arrendador, la situación puede ser desafiante. En estos casos, es importante ser proactivo y ofrecer formas alternativas de seguridad. Esto podría incluir una referencia de un empleador, prueba de ahorros sustanciales, o una oferta de un depósito de seguridad ligeramente mayor (dentro de los límites legales). La declaración-del-arrendador es una herramienta para demostrar un historial de buen comportamiento; quienes no tienen tal historial deben encontrar otras maneras de generar confianza con un posible arrendador.