Una vía de doble dirección de la responsabilidad
En el derecho contractual neerlandés, incluidos los acuerdos de alquiler, existe una delicada interacción entre dos principios fundamentales: la obligación del vendedor o arrendador de informar (mededelingsplicht) y la obligación del comprador o inquilino de investigar (onderzoeksplicht). Esto crea una responsabilidad compartida para garantizar una transacción transparente y justa. Significa que, mientras un arrendador no puede ocultar deliberadamente problemas importantes, un inquilino tampoco puede reclamar ignorancia sobre un problema que podría haber descubierto fácilmente por sí mismo.
La 'Mededelingsplicht' del arrendador
La obligación del arrendador de informar le obliga a revelar defectos significativos, no visibles, de los que es consciente y que podrían afectar la capacidad del inquilino para usar la propiedad como se pretende. Esto es particularmente relevante para los llamados riesgos ambientales. Por ejemplo, si el arrendador sabe que la propiedad está construida sobre suelo contaminado (bodemverontreiniging), o que existe un problema estructural persistente y no obvio que cause humedad, está obligado legalmente a revelar esta información a un posible inquilino. Lo mismo se aplica a cuestiones no físicas, como informar a un inquilino sobre una renovación importante y disruptiva prevista para el edificio en un futuro próximo, o sobre una disputa conocida, continua y grave con un vecino. La mededelingsplicht trata de evitar que un arrendador engañe deliberadamente a un inquilino para que acepte un acuerdo defectuoso.
La 'Onderzoeksplicht' del inquilino
En el otro lado de la moneda, el inquilino tiene un deber de investigar. La ley espera que un inquilino actúe con prudencia razonable y examine la propiedad para detectar defectos visibles antes de firmar el contrato de arrendamiento. Un inquilino no puede, después de mudarse, quejarse del pequeño tamaño de la cocina, de los azulejos del baño anticuados o del tráfico de la calle exterior. Estas son cosas que un inquilino diligente podría y debería haber observado durante una visita. La onderzoeksplicht significa que se espera que hagas preguntas. Si tienes necesidades o preocupaciones específicas (p. ej., "¿El complejo de apartamentos es generalmente tranquilo?" o "¿La conexión a Internet es estable para trabajar desde casa?") deberías preguntarlas. Se espera que el arrendador responda con veracidad.
En general, el deber de informar priva sobre el deber de investigar. Si un arrendador oculta deliberadamente un defecto serio y oculto, no puede luego defenderse argumentando que el inquilino debería haber investigado con más diligencia. Este equilibrio garantiza que, si bien los inquilinos deben estar atentos, la responsabilidad final de divulgar problemas graves y ocultos recae en la parte que posee la información: el arrendador.