Una carta de denegación, o más comúnmente un correo electrónico de denegación, es una comunicación de un agente inmobiliario o arrendador que informa a un posible inquilino que su solicitud para una propiedad no ha tenido éxito. En un entorno de negocios profesional y cortés, este sería un paso estándar para cerrar formalmente el ciclo con todos los solicitantes que se tomaron el tiempo de ver la propiedad y enviar su información personal. Un correo de denegación típico es breve, genérico e impersonal. Para evitar posibles reclamaciones legales de discriminación, nunca indicará la razón específica del rechazo. En su lugar, citará el gran volumen de interés y agradecerá al solicitante por su tiempo.
Una cortesía poco común
La cruda realidad del mercado de alquiler holandés es que la carta de denegación es una excepción, no la regla. El modo más común de rechazo no es una carta, sino un silencio completo y total. En un mercado donde los agentes reciben cientos de solicitudes para un único apartamento, operan bajo ninguna presión comercial o social para comunicarse con los candidatos que no obtuvieron éxito. La actitud predominante es que 'no recibir noticias es mala noticia'. Si no has recibido una aprobación dentro de unos días tras la fecha límite de la solicitud, es razonable suponer que has sido rechazado. Aunque es frustrante y poco profesional, esta práctica de 'ghosting' es la norma aceptada. Por lo tanto, recibir un correo de denegación real, aunque genérico, puede verse como un acto raro de cortesía profesional. Un inquilino no debe perder tiempo esperando una denegación formal que probablemente nunca llegue y debe continuar su búsqueda inmediatamente después de que expire la fecha límite.