Tipos de rampas: Permanentes vs. Temporales
Una rampa (rampa) es una característica común utilizada para mejorar la accesibilidad de un edificio al proporcionar una alternativa a las escaleras. En los edificios residenciales holandeses, te encontrarás con varios tipos. Rampas permanentes: En construcciones modernas, las rampas suelen integrarse en el diseño del edificio desde el principio. Estas suelen estar hechas de hormigón, asfalto o adoquines y están diseñadas para integrarse con el paisajismo y la arquitectura. Rampas instaladas posteriormente: En edificios más antiguos, las rampas suelen añadirse más tarde para mejorar la accesibilidad. A menudo son sistemas modulares hechos de metal (usualmente aluminio) o madera, y se atornillan a estructuras existentes. Rampas de umbral: Conocidas como una ayuda de umbral, esta es una cuña mucho más pequeña, a menudo portátil, de goma o metal, que se utiliza para superar un único umbral alto en una puerta. Aunque una lista podría mencionar 'acceso por rampa', el tipo y la calidad de la rampa son lo que realmente importan. Una rampa de hormigón bien integrada está a años luz de una estructura de madera empinada y que parece temporal.
El diablo está en los detalles: pendiente y seguridad
La mera presencia de una rampa no implica automáticamente que un edificio sea accesible. Una rampa mal diseñada puede ser inutilizable o incluso peligrosa. El factor más crítico es la pendiente (la inclinación o pendiente). El Bouwbesluit neerlandés (Decreto de Construcción) tiene regulaciones específicas para la pendiente máxima de las rampas en nuevas construcciones para garantizar que sean navegables de forma segura para alguien en una silla de ruedas manual sin asistencia. Una rampa demasiado empinada puede ser utilizable para un scooter eléctrico poderoso o alguien que empuja un cochecito, pero imposible para una persona que usa una silla de ruedas manual. Otras características de seguridad son igualmente importantes. La superficie debe ser antideslizante, incluso cuando está mojada. Una rampa adecuada debe tener bordes elevados (bordes elevados) en ambos lados para evitar que las ruedas se deslicen, y los pasamanos (pasamanos) son esenciales para rampas más largas para proporcionar estabilidad tanto a los usuarios de sillas de ruedas como a las personas que caminan. Al mirar una propiedad, no te limites a observar la rampa; evalúa su practicidad. Si es posible, pruébala. Una rampa demasiado empinada o que carece de características básicas de seguridad es un ejemplo clásico de 'accesibilidad simbólica'—un gesto que parece cumplir un requisito pero falla en su propósito práctico.
Obligación del casero y solicitudes del inquilino
Para edificios existentes, por lo general el casero no tiene la obligación de instalar una rampa simplemente porque un posible inquilino la necesite. La responsabilidad de hacer que una propiedad de alquiler privada sea accesible normalmente recae en el inquilino, con posible apoyo financiero del gobierno. Si un inquilino tiene una discapacidad y requiere una rampa para acceder, puede solicitar apoyo a su municipio bajo la Wet maatschappelijke ondersteuning (Wmo). Si la solicitud es aprobada, la Wmo puede proporcionar una subvención para financiar la instalación de una rampa adecuada. Sin embargo, el inquilino debe primero obtener permiso por escrito del casero o de la VvE para hacer la modificación a la propiedad. Mientras un casero no pueda denegar razonablemente el permiso para dichas adaptaciones, añade una capa adicional de burocracia y posibles retrasos al proceso para el inquilino.